Competir hasta el final

Muchas veces la frase «El fútbol es una metáfora de la vida» encaja perfectamente con determinados partidos o con eliminatorias enteras. Los octavos de final de la Champions del 2017 son una evidencia.

Solo los más optimistas podían pensar que el Barça remontaría un 4-0 en el campo del París Saint Germain. Es propio de la condición humana retirar el apoyo a las causas perdidas.

La gente se apunta al triunfo rápidamente y huye de la derrota. Pero es en los peores momentos de un equipo, de un grupo humano o de una organización, donde se ve si hay o no liderazgo. Y en esta eliminatoria se ha demostrado que Luis Enrique y sus jugadores tienen carácter ganador.

Obviamente los resultados son la brújula que nos indica si vamos o no por buen camino, pero en ninguna circunstancia deberían sentenciar un equipo como bueno o malo. En cambio, el trabajo debería ser uno de los baremos más importantes para ver si un grupo de personas funciona correctamente.

Ya lo dicen los entendidos, que normalmente si juegas bien acabas ganando los partidos. Una certeza que también pasa en el terreno empresarial. Si te esfuerzas y trabajas cada día para superarte, los resultados tarde o temprano acaban llegando.

Las tres lecciones que dan a las empresas los octavos contra el PSG

De la actitud de los jugadores y el técnico del Barça en esta eliminatoria se pueden extraer muchas ideas positivas. Pero, tres son las principales: innovación, talento individual y solidaridad.

  • Innovación. La crisis de juego y de resultados hizo ver al técnico Luis Enrique que era necesario un cambio de sistema. Los equipos ya sabían cómo jugaba el Barça y los jugadores necesitaban un estímulo para sorprender.

Los equipos de trabajo de las empresas también tienen que actuar de manera diferente a la habitual para mejorar los resultados.

  • Talento individual. El Barça demostró en la eliminatoria que tiene jugadores de calidad. Aunque no se vio en el partido de ida, los aficionados lo pudieron comprobar a la vuelta.

Si una empresa tiene trabajadores bien calificados acabarán dando los resultados esperados. Pueden tener un mal día o, incluso, un mal trimestre, pero es prácticamente imposible que tengan un mal año.

  • Solidaridad. Los jugadores del Barça demostraron en el partido de vuelta que si el equipo está concentrado y está dispuesto a ayudarse en favor del bien común, los éxitos no tardan en llegar.

En una organización empresarial los resultados son más positivos si los diferentes trabajadores se ayudan y aportan lo mejor que saben hacer para conseguir un producto o un servicio más completo.

La lección más grande que nos dejan a las empresas y a los seres humanos en general los octavos de final de la Champions del 2017 es que, si competimos para conseguir todos nuestros objetivos como si fuera la última pelota que toquemos, estaremos más cerca de levantar la Champions de nuestra vida.

Fuente de la imagen: www.lavanguardia.com

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